viernes, 13 de mayo de 2016

XIX Media Maratón Zaragoza 2016

Nueva edición de la Media Maratón de Zaragoza, con casi 4000 locos que corrieron bajo la lluvia con gran ambiente. Pocas novedades respecto al año pasado, por no decir ninguno.

Recorrido:



Recorrido XIX Media Maratón Zaragoza 2016

Circuito de 10K al que se le dan dos vueltas, exactamente idéntico a la edición anterior, largas rectas, con gran protagonismo de los puentes y el río Ebro que se cruza hasta en 8 ocasiones. Se mantiene el insufrible trozo del barrio de Jesús.

Perfil:


Perfil XIX Media Maratón Zaragoza 2016


Puesto que el recorrido no ha cambiado, el perfil es idéntico. Bastante llano con algunas pendientes a destacar tres; El Puente de Santiago, la calle San Vicente de Paúl que aunque no es la mas fuerte, se hace muy dura en el final de la carrera (Véase Maratón Zaragoza 2015) y la del puente de la Z-30 que es pronunciada y si tienes un mal día es criminal. O peor.

La Carrera:

No parecía un domingo de primavera. Tenía el recuerdo del espantoso calor padecido en la edición anterior. Era las seis de la mañana y el cielo estaba gris cual capa de Gandalf. No se oía una mosca, salvo los que volvían a casa tras quemar la noche maña. Aunque había tiempo, no había que entretenerse demasiado, así que me puse mi chándal y bajé a desayunar. Por lo que sea, el Hotel estaba invadido de Chinos, Japoneses o lo que sea. Y estaban arrasando con todo. Café, fruta, y algo de bollería. Las colas para el cocinero eran enormes y no tenía ganas ni tiempo. Había que prepararse para la salida.
La salida estaba a un ratillo andando desde el Hotel, así que por una vez salí con algo de tiempo de antelación. Salí de corto, ya que aunque el tiempo estaba un poco raro, al rato de correr estás asado. Aunque con la que estaba cayendo, eso no iba a ser un problema.
El ambiente en la plaza del pilar era impresionante. Cientos de corredores en los soportales, resguardándose de la lluvia. Cinco minutos antes de la salida, salimos todos en desbandada hacia los cajones.
Me coloqué en la zona final, y aunque me encontré con un par de conocidos, no quise correr con ellos. No por nada en especial, sino porque no quiero ser el lastre de nadie.
Y se dió la salida. Supongo que por delante se saldría a cuchillo, pero he de decir que es de las pocas veces que la salida ha sido tranquila en mi zona. Y allá que vamos.
Ritmo lento y cómodo al principio, también propiciado por la marea, esto hasta que no se estira un poco, tienes que andar esquivando. Algún tropezón en los separadores del carril bici. La verdad que hay que estar atentos.
Los primeros Kilómetros siempre son para buscar tu ritmo y para que la gente baje su nivel de energía. Son habituales las risas, el postureo y esas cosas.  Hasta un poco más adelante de la ida y vuelta del puente de hierro, no suele estar consolidado nada de nada.
Km 3, entramos en el barrio de Jesús y sus famosas revueltas. Que poco me gusta esta parte para correr, lo único bueno que tiene es el grupo de animación que le está echando ganas al final del paseo longares. de vuelta, a mitad de paseo, veo el coche de cierre de carrera.
Km 5, avituallamiento. Agua. Mucha agua. Además de la que está cayendo. Por deshidratación no creo que nos muramos hoy. Afrontamos la larga recta de casi 1 km en busca de la subida al puente de la Z-30. El paisaje es dantesco. Cientos, miles de víctimas de la carrera yacen moribundas junto al bordillo. Una marea botellil, muchas de ellas casi llenas.Que desperdicio. Y que guarrada..
Al poco, un corredor, llega a mi altura. Por un momento parece que me quiere adelantar. Pero no, se pone a mi lado y parece que quiera tirar de mí. No se si le ha parecido que voy mal y quiere ayudarme o le he dado pena porque corro solo... El caso es que se queda conmigo y empieza a darme conversación. No suelo hablar corriendo, porque me desfondo, pero me entretiene y se me hace mas ameno el correr bajo la lluvia, aunque parece que está amainando poco a poco.
-¿y vienes de correr en Madrid? -Pregunta.
-Si, pero no se si he hecho bien, voy arrastrando un par de lesiones. Espero que no me machaque mucho.
-Buah, yo tuve un problema con el sóleo. Tardé cerca de un año en que se solucionara. Es curioso la cantidad de músculos que descubres con esto del correr, yo pensaba que me dolía el gemelo, pero no, era el sóleo.
-Así descubrí yo el piramidal.
-Si es que esto de correr solo da problemas..
-Pero como engancha, eh
-Ya lo creo.
Km 6, afrontamos la primera ascensión al puente de la Z-30.
-Que malos recuerdos me trae esta subida - Comento.
-Pues poco a poco, y mirada lejos que dicen que ayuda.
-Yo casi prefiero mirar al suelo para no ver lo que queda..
Hay corredores sueltos, Una en concreto, está andando a mitad de subida. En que llegamos a su altura, mi acompañante le dá ánimos.
-No te pares, que es peor, luego cuesta más. Ya estamos casi arriba.
-Gracias..
Sus palabras surten efecto, y se une a nosotros, Por detrás, acaba de llegar otro grupo que también se queda. Por el momento me encuentro razonablemente bien.
Km 8: En esta recta de kilómetro y medio del paseo Echegaray el grupo se ha fraccionado. La corredora se ha ido hacia adelante, el grupo que nos alcanzó se ha quedado por detrás y mi acompañante se me está marchando poco a poco. Empiezo a encontrarme cansado. La maratón con lesión creo que se lo va a cobrar con creces.. es demasiado pronto..
-¡Vamos! -Me grita el compañero. No puedo ni responder. Por lo menos ha dejado de llover.
Km 8,8: Sirenas. Una moto se pone a mi lado:
-Ves echándote a la derecha, que viene la cabeza. -me informa.
-¿Ya? ¿Quien va líder, lo sabes? - pregunto.
- Attadi, y va como una flecha.
-Que cabrón..
Me echo a la derecha, comienzo a subir San Vicente de Paúl, y por el km 9 y algo, pasa volando.
-Como corre el moro de los cojones! - Dice alguien del público.
Y tiene razón, y parece que ni está apretando. y va sólo como casi siempre. Cuando está bien, no le gana nadie. Pasan más de dos minutos en pasar el segundo, o sea que le saca más de medio kilómetro, Dos minutos más tarde del segundo, van tercero y cuarto en un vilo.
Yo flipo viendo correr a la élite. Van a unas velocidades que a los ciclistas de la organización a veces les cuesta seguir, y parece que lo hacen como si nada..
Km 10,5: Primer paso por línea de meta. Attadi posando para la prensa, dos abrazándose. Miro el Reloj oficial.1:11:40. Pa qué. ya van más de 10 minutos perdidos. Aquí entro en una pequeña crisis. Me siento cansado y derrotado y siento que las piernas no dan más. Es lo que hay. Al agobio es mental y pienso si no sería mejor ir al hotel y mandarlo todo a cascala. Llegó a la conclusión de que el circuito es un bucle no muy largo y a malas siempre puedo cruzar el Ebro en alguno de los puentes y dejarlo estar, que tampoco habría que andar tanto. Mi cabeza se calma, mi ritmo se ralentiza y empieza mi lucha. Demasiado pronto. Otra vez.
Km 12, justo antes de la subida del puente piedra, hay un par de personas con un altavoz y suena Warriors of the world, de los manowar. Una de mis canciones favoritas y motivadoras. Un día habría que hablar de eso. Es increíble cómo a veces, un pequeño estímulo exterior puede hacer cambiar el chip. Esa canción habla de cómo los guerreros del planeta se unen en un objetivo común. Y en el fondo es por lo que estamos aquí. Estamos luchando por un objetivo personal. el porqué del objetivo es otra cosa. Pero todos queremos la gloria, y nos esta esperando en el K21. Ya lo dice el dicho. El dolor es pasajero, la gloria eterna.
Km 13,5: Nueva entrada al barrio de Jesús. El simple hecho de entrar aquí me desanima. Y aparte estoy notando un ampollón en el arco del pie derecho que me está jodiendo vivo.
Km 16, se me ha subido el gemelo derecho. Duele. Espero que se pase. Vuelvo a ver andando a la corredora del puente de la vuelta anterior.
-Vamos, que esto ya hasta andando se hace.
-Gracias
A los dos minutos, me adelanta. Le acompaña alguien. Han cogido ritmo fuerte y se pierden en la distancia.
Km 17: Subida del puente otra vez. el dolor me ha subido a los Isquios, algo de los cuádriceps y parte de la rodilla. No en si la rodilla, yo diría más bien los tendones. Estamos cerca de meta, ¿llegaría andando?. Miro a la derecha y veo  a unos 500 metros al coche de cierre. Me niego a mirar el reloj.
Echo a andar, el dolor es bastante aceptable.
Llegando arriba se me para una moto a mi lado. Es el mismo de hace un rato.
-¿Te encuentras bien, necesitas algo? -Me dice
-Estoy bien, sólo tengo los isquios machacados, pero por lo demás bien, contesto.
-Cualquier cosa, tienes a los voluntarios, a la policía y demás eh
-Vale.
La moto acelera, me adelantan 2 corredores, que también se interesan por mi, pero les digo que se vayan, no quiero joderles la carrera. empezando la bajada, hay un fotógrafo. Les ha tirado fotos a los de alante y veo que tiene intención de hacer lo propio conmigo.
-Si la vas ha hacer, me pongo a correr -bromeo
-No te preocupes, si en la foto salís parados.
La verdad que me sacó una sonrisa, y me puse a correr para la foto. lo mantuve unos metros. Bajando aun duele más.
Km 18, comienza Echegaray y Caballero. Un voluntario en el cruce me lanza ánimos les doy las gracias y no se porque miro al puente. ¡La leche, que tengo el coche y al último corredor a 100 metros! ¿A que me recuerda esto? Hay que correr, algo, lo que sea, pero hay que correr.
A 200 metros, veo dos patinadores con botes. La primera vez que les veo.
-¿Os queda algo? Pregunto con desesperación.
-¡Claro!
-Dale un buen chufletazo a la pierna derecha.
Literalmente, vació el bote creando una nube de reflex/co2 lo que sea.
No se si fue el reflex, si fue placebo o realmente funcionó, pero me sentí infinitamente mejor. El dolor y el gemelo subido estaba ahí pero era soportable. Encontré fuerzas para ponerme a correr (mas o menos) y seguir. El dolor era más llevadero, pero el agotamiento que llevaba no.
Km 18,5: Puente de la unión. Grupo de Animación. Acojonante. Volcados como si no hubiera un mañana. Ruido ensordecedor, del que te llega. Me habían echo pasillo, Oía mi nombre por todos lados. Me recordaba a alguna de las etapas del tour de Francia cuando los aficionados copan la carretera y abren paso a medida que se acerca el ciclista. Imposible no sonreír. Y aplaudirles. Se han currado toda la movida y a mi me estaban ayudando. No hace que corras mas, pero lo que decía antes, a veces un pequeño cambio de chip ayuda.
Tras pasar el puente, vuelvo a ver al motorista.
-Vamos chaval, que esto se acaba, voy a estar cerca de ti hasta meta..
-¡Gracias!
Según me acerco al puente de piedra, no dejo de recibir ánimos y apoyo de la gente. Espectadores, corredores que han terminado.. Alguno me ofrece powerade, es acojonante esto.
Km 19 y pico, luchando con la subida de San vicente de Paul (¡cabroneeees!)  un señor mayor me grita.
-Vamoos, que el último y penúltimo tienen premio.
No puedo responderle, y hago un gesto de agradecimiento,
Km 20 o así, esquina coso con calle Don Jaime. El motero otra vez, me hace gestos de victoria. Entro a la calle don jaime y eso se viene abajo. Bocinas, altavoces, gritos de ánimo, aplausos. Joder, cualquiera diría que soy el líder de la carrera, y soy el último. Este km se me pasa volado. Los adoquines de Espoz y Mina me hacen daño, pero qué más dá, la batidora otra vez. Aquí me puse a llorar en Septiembre y me estoy emocionando, pero si me pongo a llorar me quedo sin aire. La calle Alfonso aún hace más ruido a mi paso.. joder, joder.
Entro a la plaza del pilar y no oigo nada, veo a la mascota del Rincón, que me choca los cinco y Grito. Otra vez más. Se está convirtiendo en costumbre esto. Inmediatamente se me acerca un miembro de la cruz roja:

-¿Te encuentras bien?
- Todo lo bien que se puede estar después de 2 horas y media, pero si, dentro de lo cabe, si.
-Vale,pasa por allí y te darán el avituallamiento.

Me dan la medalla, y una bolsa con agua,una naranja, un Powerade y un xuxo de crema. Necesito sentarme un par de minutos. Abro el Powerade y voy dándole sorbos. Oigo un estruendo de público, acaba de llegar el cierre de carrera. Estoy molido, dolorido y mojado. En el hotel me espera una buena ducha y gel de frío. Lo malo es que está en César Augusto y hay un cacho, pero bueno, poco a poco.
Mientras subo la calle alfonso, mi cabeza piensa. Piensa en la carrera de hoy y en lo jodido que ha sido pero... ¿Ha valido la pena?.. Ya lo creo..

Organización:

Hay que dar gracias a La policía y fuerzas de seguridad, que esta vez no hubo ningún problema con el tráfico, A la cruz roja por su atención y dedicación, Al motorista que tanto me ha ayudado y al que me gustaría darle las gracias en persona, a los voluntarios, que sin ellos esto no sería posible, a los grupos de animación que se dejan los pulmones.
Tan sólo voy a decir un par de cosas:
-Algo más que agua en los avituallamientos estaría bien.
-El servicio de grabación de medallas debería estar presente.
-Lo del barrio de Jesús, habría que mirar de modificarlo.
Y como último, una llamada de atención. No se si los voluntarios reciben instrucciones acerca de que o como dar el agua a los corredores, y me explico.
En el avituallamiento del km 15 (mas o menos), cuando llegué estaba desmontado parcialmente. Había dos mesas al al fondo con botellas y un palet sin empezar que parece que estaban en proceso de cargarlo a un camión. Justo antes, había dos voluntarios, una sujetando una gran bolsa de basura y otra recogiendo botellas del suelo. El caso es que cuando llego con intención de coger agua (lo hago siempre en todos los avituallamientos que haya en la carrera) Me dice que si quiero agua, le acepto el ofrecimiento y ni corta ni perezosa, pero disimulando un poco, me da una botella medio abierta, con la mitad vacía.. que acaba de coger del suelo.. Eso no se hace, estoy de acuerdo en que es mucho derroche, pero jugar con la salud...

Resultados:

Mi peor Media Maratón sin duda:

Distancia: 21097 m (Homologado)
Tiempo Oficial: 2:37:03
Tiempo Real: 2:34:04
Ritmo: 7:18 m/km
Clasificación General: 3381/3387
Clasificación Masculina: 2572/2757
Clasificación Categoría (Vet A Masc): 546/550

Resumen:

Carrera dura por la lluvia y agotamiento por acumulacion, tanto de malas sensaciones como por lesiones. Es obvio que estoy lejos de estar bien, pero espero que tarde o temprano vuelva a la senda en que una carrera no sea un martirio. De la misma manera, en ninguna otra carrera me ha hecho sentir como esta. Lo que he vivido en el último kilómetro y medio es algo indescriptible. Puedo decir, aunque sea fato y me joda un poco, que el público de Zaragoza es el mejor y el que más se vuelca con los participantes y con diferencia. No lo olvidaré nunca.

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